La tercera semana de Junio se fue con la pavada de López el
ex Secretario de Obras públicas que recibió coimas de empresarios de la
construcción.
Mientras tanto se
diluía en la nebulosa de los días la posibilidad de una huelga por el veto de Macri
a la ley anti despidos que había sancionado el Congreso de la Nación, los
medios repetían hasta el cansancio el tragicómico episodio de las bolsas de
dólares, el publico consumía telenovela
del malvado Lopez, el malhechor asalta conventos, y el gobierno de Macri aprovechaba la volada para:
1) Reducir el impuesto a los bienes personales en un ochenta
por ciento. El impuesto a los bienes personales es el que pagan los más ricos
que superan un cierto capital, en propiedades, autos, acciones, yates, obras de
arte etc. Antes pagaban 1,25 sobre el
patrimonio ahora pagaran 0,25.
2) Mantuvo intacto el esquema de retenciones del impuesto a
las ganancias sobre el S.A.C. (aguinaldo) que se pagara este fin de mes. Cuando
una de sus promesas de campaña había sido que los trabajadores no iban a pagar
impuesto a las Ganancias. Los sindicalistas que hace un año el 31 de Marzo de
2015 le hicieron un paro general nacional a Cristina por el impuesto a las
ganancias, no dicen ni pio.
Con estos ejemplos nos alcanza para entender aquello de la
transferencia de riqueza, de los sectores asalariados hacia los más ricos. En
una sola semana y sin ponerse colorado Macri
lo hizo.
No es que no hay
plata para dejar de cobrar el impuesto a las ganancias a los trabajadores, es
que hay que seguir cobrándolo para poder dejar de cobrarles otros
impuestos a los ricos. Igualito que
cuando aumentaron electricidad, gas y transporte público para dejar de cobrar
las retenciones a los agro-exportadores o eliminar el impuesto a la importación de
los autos de alta gama.
Y no es que lo de López no sea algo serio, está muy bien que
vaya preso, como tiene que ser. Preso el corrupto y también el que corrompe.
El que puso la teca también tiene que ir en cana. Sea quien
sea. Yo no fui.
Pero de ahí a hacer de esto una cuestión nacional hay una
diferencia importante. En Argentina donde la coima (cohecho)es parte del folclore, la
pequeña ventaja, el chapeo, son deportes -y no de las personas más necesitadas
precisamente- no podemos distraernos con estos asuntos intrascendentes mientras nos despluman unos asalta caminos.