Entre 2012 y 2018 hubo en el mundo una efervescencia, un entusiasmo de movimientos sociales, por las libertades individuales, derechos de las minorías, Black live matters, estudiantes en Chile, separatismos en Europa, variedad y vivacidad de reclamos y reivindicaciónes.
El viejo orden reaccionó. Y reaccionó cómo sabe hacer. Con implantación de miedo (evento Covid) y con la implantación del odio.
Y en eso estamos.
Todo lo viejo está reaccionando al cambio de era que transitamos. En la política en la economía, la sociedad y el estado. Lo viejo siente el peligro de dejar de existir si sus paradigmas ya no son válidos.
Y ojo que lo viejo habita personas de cualquier edad.
En la política lo viejo hoy se presenta como lo nuevo.
Las derechas y ultra derechas se ponen nombres atractivos como patria, libertad y cambio. Pero son lo viejo y conocido: miedo, control, odio.